Ayer se celebró un acto de reconocimiento al mérito de nuestros estudiantes: El premio fin de carrera de 2013, donde se premia a los estudiantes de las universidades públicas con notas más altas.
El acto fue presidido por el Ministro Wert. Y fue todo un espectáculo ejemplar. Muchos de estos estudiantes, los excelentes, aquellos a los que siempre hace referencia esa caterva pepera encabezada por este ministro de sonrisa falsa, se negaron a saludarle y le dejaron con la mano en el aire.
Una acción que les ennoblece, que les agiganta. Estos estudiantes con nota media por encima de 9 han estado a la altura, han sabido actuar en el momento oportuno. Estoy seguro de que a este innoble ministro no se le olvidará este acto.
Observen sobre todo desde el segundo 55 al final, donde se ve que el ministro Wert quiere dar el diploma y la mano a un estudiante que va con traje –debe pensar, uno de los míos—, y sin embargo se queda con la mano en el aire y con cara de panoli.
Esta tarde, en el programa ‘Más vale tarde’ de La Sexta acabo de ver a dos de estos estudiantes que de forma razonada han reconocido que lo hicieron, espontáneamente, para apoyar a la Enseñanza Pública, la misma que les ha llevado hasta donde están. Y, en vez de echarse flores, han querido acordarse y reconocer la labor de sus profesores –funcionarios públicos--, a los que han agradecido su formación, profesionalidad y esfuerzo.
A la vez, otra estudiante de los que no quisieron saludar al ínclito Wert, de nombre Yasmina, por teléfono, decía: “mi padre es barrendero, mi madre limpiadora, y si no hubiera sido porque la Universidad tiene unos precios asequibles no habría podido estudiar. Ahora no podría hacerlo.
Las tasas universitarias se han triplicado, las becas han disminuido y ahí está Wert queriendo encima que sus víctimas reconozcan ‘su labor’, él, precisamente su verdugo.
Hoy, escribo emocionado porque estoy seguro de que este país tiene que tener futuro con estos jóvenes, si es que, por desgracia, no terminan siendo víctimas de lo que la Ministra del Rocío ha llamado “movilidad exterior” y no es sino un éxodo obligado, ruinoso, injusto y desvergonzado para nuestro país.
¡Bien por estos estudiantes!, que habiendo terminado su carrera con magníficos resultados, se han solidarizado con otros que no podrán estudiar en el futuro debido a las reformas y recortes en la Enseñanza Pública, porque desde ahora, así lo decía uno de ellos,estudiarán los que tengan y no los que quieran.
Gracias, sois lo mejor de esta sociedad dormida, vosotros con estos actos espontáneos –no había nada preparado de antemano— demostráis que aunque no tengáis por desgracia el poder para cambiar esta reforma, tenéis dignidad y vergüenza, algo de lo que carecen los miembros de este gobierno y en concreto quienes encabezan este destrozo: Rajoy y Wert.
Murcia ha elevado la voz desde la tribuna de invitados para denunciar la deuda del Consell a los dependientes
El presidente de las Corts Valencianes, Juan Cotino, ha expulsado del hemiciclo del parlamento autonómico a la mujer dependiente Elvira Murcia --quien estuvo encadenada ante el Palau de la Generalitat--, ya que ha interrumpido la sesión plenaria diciendo que el Consell les debe "dinero". "Vergüenza del PP", ha subrayado.
Durante la intervención de la diputada de EUPV Esther López en el debate de una propuesta para crear una comisión de investigación sobre la aplicación de la Ley de Dependencia --que ha rechazado el PP--, Murcia ha elevado la voz desde la tribuna de invitados para denunciar que el Consell "debe dinero" a los dependientes y que les están "ahogando".
Las protestas de Elvira Murcia --afectada por la enfermedad conocida comúnmente como 'huesos de cristal'-- se han oído en el hemiciclo, donde se ha hecho el silencio, hasta que el presidente de las Corts, Juan Cotino, ha recordado que los invitados no pueden intervenir en el pleno"
Murcia ha proseguido con su protesta: "Vergüenza del PP" que "tienen dinero para lo que quieren", y "Blasco ahí sentado" --en alusión al diputado 'popular' acusado en el 'caso Cooperación'--, han sido algunas de las quejas que ha seguido lanzando, tras lo que Cotino ha advertido de que la había expulsado. "Que me echen, me da igual", ha apuntado Murcia. Su protesta le ha valido los aplausos de la oposición.
Por su parte, la diputada de EUPV, Esther López, ha dado las gracias a Elvira Murcia. Asimismo, la parlamentaria de Compromís Mònica Oltra ha destacado que "la dignidad ha entrado en las Corts" mientras que el diputado socialista José Manuel Sánchez ha dicho: "Ya nos gustaría que los dependientes de esta comunidad tuvieran el mismo grado de amparo por parte del presidente Fabra que el señor Blasco". "Mientras el presidente es incapaz de expulsar a los corruptos, sí expulsa a los dependientes", ha lamentado.
Poniéndose de acuerdo el cuerpo y la razón... 1: "Sólo a veces no dan ganas de escucharte, dan ganas de llenarme de amnesia, de olvidos por completo, hasta de existir. No en el acto de la muerte y la desaparición, No... únicamente sería teñirme de tinta invisible, que me siente bien un poco de silencios, tranquilidad, nostalgias y por qué no, de ti. De tus ojos y tu risa silenciosa. De esas caricias que dejan huellas cual vi bisturí atravesando mi mente. A veces, me viene bien extrañarte, pero que va... me viene mejor tenerte cerca." font: roo ramone
La vuelta a las cavernas con el Partido Popular:
Miren ustedes, seguro que hay personas que al leer mis entradas piensan que exagero. Seguro que algunos dirán que mi inquina al Partido Popular desnaturaliza mis artículos. Y no seré yo quien me justifique y hable de mi neutralidad. Nadie es neutral y ¡ay de aquel que se cree objetivo y en posesión de una verdad única! Bastante tengo con luchar con mi pequeña y propia verdad.
Lo que ocurre es que para evitar que se llegue a ser sectario deberíamos, además de dar nuestra opinión, aportar datos objetivados. Los datos si que son innegablemente indicadores de una situación. Otra cuestión es la explicación de los mismos, que naturalmente puede ser sesgada.
Bien, pues a partir de estas premisas, afirmo que el Partido Popular y su gobierno nos están retrotrayendo al siglo pasado. Y lo digo por las leyes que están aprobando y las actitudes que están tomando, no por cuestiones de mera opinión.
Y si no, fíjense ustedes en estos puntos :
Ley LOMCE, conocida como ley Wert. Una ley que, además de reducir considerablemente recursos, pretende que volvamos a tiempos pasados. Por ejemplo, haciendo que la Religión –a pesar de que la Constitución hable de Estado Aconfesional— vuelva a contar como nota en el currículo de los alumnos. O permitiendo que se subvencione a los colegios que segregan a los alumnos por sexo. O haciendo que la Universidad, gracias a sus tasas actuales, sea sólo para elegidos que puedan pagarla (las tasas han llegado a subir hasta un 300%). O proclamando una guerra de lenguas donde no la había. O haciendo que el nombramiento del director de los colegios lo nombren fuera de la Comunidad Escolar. Un retroceso que nos transporta claramente al siglo pasado.
La ley del aborto. Aquí la cosa queda muy clara. Hay una lucha en el gobierno y son tres las posiciones. Las tres están de acuerdo con cargarse la ley de plazos existente. Hay gente del gobierno que defiende, junto a las tesis más extremas y acordes con la Iglesia Católica, la penalización del aborto, en cualquier supuesto, lo que nos llevaría directamente a la época franquista. Otra posición pepera es volver a la ley de 1985. Y la tercera es una intermedia por la cual, se volvería a la de 1985 pero admitiendo como penalizado el aborto por malformación del feto, lo que nos llevaría a antes de 1985. En cualquier caso, una ley que nos aleja de los países de nuestro entorno y nos aproxima a las tesis de la Conferencia Episcopal. Un retroceso de treinta años o más.
Una reforma laboral que ha precarizado aún más empleo y que ha rebajado y facilitado de tal manera el despido, que nos deja sin protección y sin gran parte de los derechos que los trabajadores conseguimos durante los últimos cuarenta años. Elaborada al dictado de la CEOE por la ministra que ha sido nombrada hada madrina –cuando debería ser bruja maligna— y cuyo único mérito es pedir ayuda a la Virgen del Rocío.
A esto podemos sumar su afán totalitario por hacerse con el control de las instancias judiciales (CGPJ y TS), por evitar cualquier tipo de protesta o crítica, aunque sea a palos; por comparecencias en plasma y/o que no admiten preguntas de los periodistas. Por ninguneo de la oposición, aplicando el rodillo de manera lacerante. Por desoír cualquier tipo de participación ciudadana, incluidas las constitucionales como las ILP.
A los puntos anteriores, añadamos que la Sanidad Pública ha dejado de ser gratuita y universal (en Madrid puede que a medio plazo deje de ser pública, también, si no lo evitamos), que los débiles son desahuciados y sufren el olvido del Estado, que los enfermos y desvalidos se han quedado sin ayudas públicas, que la corrupción corroe a los populares, que…
Podría seguir, pero estoy seguro que cualquiera de los lectores puede añadir más argumentos a mi teoría. Por eso, y no por animadversión, declaro que el Partido Popular nos está remontando a las cavernas, su lugar ideal.
Es momento de seguir, fortalecer y aumentar nuestras quejas y manifestaciones. Ni un paso atrás o nos arrepentiremos. Este gobierno debe ser contestado y criticado mientras no gire el rumbo. Y no sólo en economía, porque si no, a los más de seis millones de parados deberemos sumar cuarenta y seis millones de ciudadanos maltratados y convertidos en súbditos. Y eso, ya muchos lo hemos sufrido en sus gloriosos tiempos imperiales.
Salud y República