Cuando vengas a buscarme rompe antes los relojes,
ellos hacen que las horas se conviertan en ceniza,
que los besos se den con prisa,
que la ternura se levante veloz
y se vista.
Cuando vengas a buscarme
trae siglos de paciencia,
deja fuera esa costumbre arcaica
de hacer con el amor
una conquista.
Quiero que vengas
no como quien viene a reposar en los brazos de una madre,
no como quien viene a mostrar la brújula que señala las utopías,
no como quien viene para recomponer el cuerpo que destrozan las fábricas de rutinas.
Si vienes a buscarme rompe antes los relojes.
Ten presente:
el tiempo es un verdugo
que mata con su tic tac
a los que aman una eternidad
en un instante breve.
imatge de Kalvellido |
font: Si vis pacem